miércoles, 18 de noviembre de 2009

Una gran idea

Hace más o menos 50 años (o más) que la tecnología automotriz se mantiene relativamente estable; con mejoras en algunas cuestiones tales como materiales, elementos de seguridad, etc., que no hacen al corazón de la tecnología: el uso individual de combustible.
La aparición de autos eléctricos fue saludada con grandes expectativas, pero hasta ahora no logró imponerse, quizás por las resistencias de los propios usuarios.
Ahora se anuncia el estudio e investigación de un nuevo concepto, que quizás en el fondo resulte como lo de los autos eléctricos, una gran idea con pocas posibilidades de aceptación práctica.
Sin embargo, me pareció que esta vez podría tener algún incentivo práctico. Se trata del proyecto SARTRE en estudio en el Reino Unido, según nota publicada en el diario La Nación, que propugna el uso de un vehículo "líder" respecto del que podrían ir acoplándose y desacoplándose otros vehículos a voluntad. Durante el tiempo que el rodado se encuentre en la "formación", su conductor podría olvidarse totalmente de los problemas del tránsito (o por lo menos dedicar sólo media parte de su cerebro esos problemas), dedicándose a otras tareas (como leer, hablar por teléfono, limarse las uñas, etc.. -siempre y cuando los caminos sean de países desarrollados, eso sí).
Según la nota, se estima en aproximadamente un 20% la reducción de emisiones nocivas; si a ésto sumamos el incentivo de poder dejar de estar atentos al tránsito siquiera por un instante, creo que aquí sí se da la combinación adecuada para que los usuarios finales estén dispuestos a probar la nueva tecnología, si ésta llega a estar disponible.